Medicina Antroposófica
La MEDICINA ANTROPOSÓFICA se originó a principios del siglo XX, a través del trabajo liderado por la Dra. Ita Wegman y el filósofo Rudolf Steiner, fundador de la Antroposofía.
Actualmente, se practica en más de 60 países, tanto en clínicas y hospitales, como en centros y consultorios de atención ambulatoria. En Argentina se encuentra a disposición, en varias provincias. Sigue desarrollándose continuamente desde la práctica clínica y la investigación científica.
El proceso terapéutico de la medicina antroposófica se basa en el equilibrio de cuatro principios organizativos: el nivel físico, el nivel de fuerzas vitales o vitalidad; el nivel mental o la esfera psicológica/emocional y el nivel individual o ego. La salud depende del equilibrio de estos cuatro principios, por eso, cuando uno de ellos se desequilibra, hay que restablecerlo.
No obstante, la interacción entre ellos da lugar a tres sistemas funcionales:
El sistema neurosensorial, el sistema rítmico y el llamado sistema metabólico, que se corresponde con las tres cualidades anímicas del ser humano:
• Sistema neurosensorial: pensamiento
• Sistema rítmico: sentimiento
• Sistema metabólico: voluntad
Este sistema triple impregna todo el organismo humano y está sujeto a cambios en las diferentes etapas de la vida. Cada vez que ocurre esto, el sistema rítmico (“ubicado” entre el sistema nervioso y el sistema metabólico) crea un nuevo equilibrio, lo que permite que la interacción continúe en armonía. Cualquier desviación del estado “normal” provoca que aparezcan diferentes síntomas de una enfermedad.
Uniendo la ciencia y el espíritu
VALOR AÑADIDO
Numerosos estudios demuestran que el valor añadido de un tratamiento antroposófico radica en una reducción de los gastos en comparación con un tratamiento convencional. Esto resulta de particular importancia en el caso de enfermedades crónicas, en las que el período de procedimiento puede prologarse o incluso durar toda la vida. Las pólizas de seguros médicos muestran unos gastos médicos mínimos. Por ello, en algunos países las pólizas de seguros médicos aceptan el método antroposófico en su cobertura debido a sus gastos relativamente inferiores.
La sociedad heterogénea actual vive en un mundo con un mercado uniforme, de diversidad reducida y servicios individuales cada vez menos personalizados. Los conceptos antroposóficos ofrecen la base para una medicina que es ahora más necesaria que nunca: terapias holísticas diferenciadas que se centran en la personalidad de las personas.